La extrusión de aluminio implica forzar la aleación de aluminio a través de un dado para crear un perfil continuo con una forma transversal específica. El proceso puede producir una amplia gama de productos, desde formas simples como varillas y tubos hasta diseños complejos utilizados en aplicaciones arquitectónicas. La principal ventaja de la extrusión de aluminio es su capacidad para crear componentes livianos pero fuertes, por lo que es una opción ideal para muchas aplicaciones.